- ¿Te sientes protagonista de tu vida o las 24 horas del día parecen no ser suficientes para ti ? A ver que adivino que hay mucha prisa interna y ansiedad, si ?
- La pregunta de oro es: “¿Ese trágico panorama puede ser cambiado?”. La respuesta es sí !
- Te invito a lleer mi columna para conectar contigo mismo otra vez y retomar las riendas de tu vida 🙂
Todos los días nos es regalado 24 horas para hacer “la vida suceder”, como dice la expresión popular. Como un tren, empezamos el dia despacio (pero no mucho jaja) y muchas veces, antes del mediodía, estamos acelerados contestando correos, grabando notas de voz, solucionando demandas.
Hay una gran prisa interna, también llamada de ansiedad. La cabeza con mil pensamientos no regala mucha tregua, vive en el futuro y el oxigeno parece que falta. Pausa (también rapida) para nutrir el cuerpo. Un ojo en el celular y el otro en el plato. El tiempo nos “arrastra” y, en el final del día, la sensación es de cansancio o preocupación por las tareas que se quedaron pendientes para las próximas 24 horas. El sueño parece que no descansa.
La pregunta de oro es: “Ese trágico panorama puede ser cambiado?”. La respuesta es sí ! Pero da trabajo, y mucho ! Es mas fácil “vivir en el modo automático, con el externo siendo el protagonista de nuestra historia. Tomar las riendas de nuestra existencia, salir del papel de coadyuvante, para asumir el papel principal exige valentía, con una boa dosis de luz, creada por los primeros pasos en la trayectoria rumbo al autoconocimiento.
Inúmeras veces, nos olvidamos que podemos elegir. Nos olvidamos que podemos crear y recrear nuestra realidad, nuestra vida. Nos olvidamos que podemos buscar nuevos ángulos de visión de una misma situación. Todo eso es posible desde que empecemos a mirar hacia dentro y cuestionar: para qué tanta prisa ?.
Si estamos atentos, el Universo nos muestra ejemplos admirables de aquellos que saben saborear los momentos. Se colocan en el presente, se conectan con ellos mismos y sienten. Perciben cada son, sabor, textura, olor y nutren el cuerpo, la mente y el corazón con estos instantes mágicos. Se llevan por completo para pasear, trabajar, bailar. Cuerpo y, principalmente, pensamientos estan conectados y en el mismo lugar.
Aun estando con el cotidiano con adversidades, ya sabemos que somos nosotros que administramos la velocidad del tren de la vida y, con eso, podemos hacer paradas estratégicas para observar y retomar el ritmo con más ánimo, alineando el reloj interno para un movimiento menos apresurado y mucho más fluido.
La invitación es, más allá de asumir el protagonismo de tu existencia, lanzar una nueva mirada para la rutina apresurada, y cambiar la percepción sobre ella. Volvemos aquí a ser alumnos para que podamos aprender a priorizar no solo actividades, sino lo que hace sentido de verdad para nosotros. Nos tornamos dueños del nuestro tiempo, donde no cabe una prisa sofocante. El momento presente gana espacio y trae junto con él la magia de sensaciones y conexiones. Un brindis a una nueva existencia llena de posibilidades !